Jan
24
ABANDONADOS EN EL AMOR
Ser santo es abandonarse por amor en los brazos del Padre, sin límites ni condiciones, como Cristo, dejando libertad total a Dios para que conduzca nuestra vida según su primigenio diseño de amor, el que tuvo con nosotros desde el principio de la creación, cuando nos creó a su imagen y semejanza; nos plasmó con sus manos tomando como modelo a su Hijo Jesucristo (San Ireneo). Esta es la verdadera razón de nuestra existencia, de nuestra vida, de nuestro amor. Esta es la única felicidad, la única alegría: ser santos como Él es santo.