Oct
20
MARIA Y LA COMUNIDAD
“Todo cristiano… sabe que la encarnación de la Palabra le atañe igualmente de forma inmediata, se debe cumplir también en él si es que quiere llevar el nombre de cristiano”. El sí de María es el sí de Jesús al Padre: “He aquí que vengo a hacer, oh Dios, tú voluntad” (Hb 10, 7), “he bajado del cielo, no para hacer mi voluntad, sino la voluntad del que me ha enviado” (Jn 6, 38); y es también el sí que todo cristiano pide cada día al rezar el Padrenuestro: “hágase tú voluntad”, la disposición a aceptar la voluntad de Dios en nuestra vida.
“Todo el que como ella es esclava o siervo de Dios, puede ser madre de Jesús, puede hacer que la Palabra de Dios se convierta en carne personificada”. Porque “estos son mi madre y mis hermanos.
“Todo el que como ella es esclava o siervo de Dios, puede ser madre de Jesús, puede hacer que la Palabra de Dios se convierta en carne personificada”. Porque “estos son mi madre y mis hermanos.